«Si estuviera enfermo visitaría a un Doctor, si estuviera en problemas contrataría a un Abogado, pero si tuviera un Gran Sueño contrataría a un Arquitecto»
-Pintar una pared de la habitación en un tono que contraste. Por ejemplo, en este caso la habitación es blanca y una pared violeta, donde se sitúa el cabezal de la cama.
-Para decorar esa pared, elegimos unos cajones de un mueble viejo, que pintamos en blanco. Los colocamos en diferentes niveles sobre esa pared.
– Con cinta de carrocero, dibujamos un skyline de alguna ciudad. Se puede elegir un perfil de una ciudad conocida, tipo Paris, Londres, Nueva York, e imprimir el perfil en el tamaño necesario. En este caso es un perfil inventado de una ciudad con toques árabes.
-Pintamos en blanco el espacio destinado a skyline, y lo dejamos secar.
– Una vez seco, levantamos la cinta con cuidado y limpiamos los bordes con un trapo húmedo. Con un pincel podemos terminar algunos detalles.
-Por fin tenemos cabecero de la cama. Sencillo y original. ¿Qué os parece?
Esperamos que os guste 😉
Encontramos una caja de madera como ésta, aunque en peor estado, y algo manchada.
Teníamos que hacer algo con ella, y decidimos convertirla en zapatero, pintándola en blanco para disimular las imperfecciones y poniéndole 4 ruedas para facilitar el manejo.
Éste es el resultado:
Es muy sencillo y resulta práctico. Os animo a que probéis y comentéis que os parece!
En esta ocasión, os relatamos la última ruta realizada por el cauce del río Borosa, en el paraje de la Sierra de Cazorla. Iniciamos nuestros pasos indecisos por las nubes y la llovizna, que se habían dejado ver en todo el trayecto en coche. Decidimos comenzar, y si fuese necesario, dar la vuelta en el momento en el que la lluvia tomara más fuerza.
El río Borosa es el gran protagonista en todo el trazado de este sendero perteneciente al llamado grupo de las «Rutas del Agua». Se parte desde la piscifactoría, donde hoy día se estudian especies como la trucha común (Salmo trutta), propia de aguas de alta montaña o el cangrejo de río autóctono (Austropotamobius pallipes).
Caminamos paralelos al río Borosa, afluente del Guadalquivir, y rápidamente contemplamos el Charco de la Cuna, excepcional poza con aguas color turquesa. Pasamos por el paraje conocido como Los Caracolillos, montaña de roca formada por capas de sedimentos marinos, que en la actualidad se encuentran curvadas a más de 600 msnm. También observamos el pliegue en forma de «u» del arroyo de las Truchas.
En estos primeros kilómetros la pendiente, a pesar de ser siempre ascendente, en ningún momento es excesiva. La senda cruza el río en varias ocasiones, con pequeños puentes de estructura metálica y traviesas de madera, hasta llegar a la Cerrada de Elías.
Esta cerrada es una de las parte más interesante del recorrido, en las que existen unas pasarelas de madera enmarcadas en paredes de roca por encima de las aguas del Borosa.
Al salir de las pasarelas comienza nuevamente la pista. Apreciamos una pareja de cabras comunes y al acercarnos, para nuestra sorpresa, una pequeña cabra montés buscando algo de comida de los senderistas que por allí pasábamos.
Pronto llegamos a la central eléctrica del Salto de los Órganos y a la cascada con el mismo nombre. A pesar de tener suficiente agua, no es la época más recomendable para visitar esta magnífica obra de la naturaleza.
La central eléctrica, fue construida a principios de los años treinta para suministrar electricidad a varios pueblos de la comarca.
En este punto de la etapa, acompañados del ruido del agua de la cascada, cogimos fuerzas con un tremendo bocadillo de tortilla.
A partir de la central eléctrica, la subida se hace más pronunciada, y con la barriga llena, nos cuesta trabajo recuperar el ritmo. Seguimos disfrutando de la grandeza del lugar, con exuberante vegetación, continuas cascadas y pozas de aguas claras.
Antes de llegar a la Laguna de Aguas Negras nos aguarda una última sorpresa, una impresionante montaña rocosa atravesada por varios túneles oscuros y estrechos, por los que discurren los canales que llevan agua a la Central Eléctrica. ¡Espectacular!
Compañeros de fatigas conocían perfectamente este recorrido y se adelantaron, aprovechando nuestra ignorancia y la poca luz, nos asustaron escondidos entre los recovecos que forman la rocas. ¡Ya les tocará a ellos sufrir!
Fue una zona muy bonita que no presentan ninguna dificultad pero que si recomendamos utilicen alguna linterna para evitar incidentes.
Llegados hasta aquí, cogemos la senda que nos lleva al mismo nacimiento del río Borosa, a tan sólo 300 m. En mitad del camino nos encontramos con un gusano que llama rápidamente la atención por su color verde pistacho. ¡Que belleza!
En nada nos sorprende el nacimiento con aguas que barbotean sobre la roca y crean el caudaloso río.
Retrocedemos y atravesamos la presa para continuar por una vereda bien marcada que nos conduce hasta la Laguna de Valdeazores.
La vereda se convierte en un amplio camino hasta el que, en ocasiones, acceden 4×4 y otros vehículos. Continuamos ascendiendo el camino hasta la cadena que impide el paso. Allí tenemos un coche esperándonos. Esta última parte de la ruta se nos hace más pesada, los kilómetros ya pesan en nuestras piernas y las ganas de regresar se multiplican. A pesar de todo, aún nos queda que disfrutar de extrañas formas que crea la naturaleza.
Un placer realizar esta ruta y siempre mejor en buena compañía.
Comenzó en Abril de 2015, con la selección de 20 proyectos en todo el territorio de Andalucía, para mejorar las oportunidades de empleo de la zona Euro-Mediterránea en el ámbito de la economía «verde» y ha finalizado en Octubre, con la presentación de los proyectos finalistas.
Primer encuentro, Mayo 2015: Seminario sobre Construcción Sostenible en Cagliari, Italia:
Curso de formación realizado por Fortalezas Formación vía on-line y con clases presenciales en CADE Antequera.
Curso de especialización de proyectos empresariales por Bravo Consultores.
Finalización del proyecto Egrejob en Sevilla. Sesión final de la acción formativa sobre construcción sostenible y creación de empresas dirigida a jóvenes emprendedores/as.
Presentación del proyecto EGREJOB.
A este acto no pudieron acudir el resto de compañeros, los cuales echamos en falta:
Beatriz Segura, Álvaro Freire, Arany Salmerón y Lidia Morales.
Aún falta la entrega de diplomas en Florencia. ¡Impacientes e ilusionados!